La organización solicitaba a sus víctimas que abonaran los pagos antes de que supuestamente se emitieran las facturas. El caso se dio a conocer a raíz de las múltiples denuncias que se realizaron
El reciente avance de una investigación judicial en Rosario de la Frontera, en provincia de Salta, permitió desmantelar una banda dedicada a estafas que, durante meses, había logrado captar la atención de numerosos vecinos mediante la promesa de supuestos descuentos en el pago de los servicios públicos. Así, pedían un pago por adelantado antes de la supuesta emisión de la factura.
Tras medio año de averiguaciones, la operación, liderada por la Policía de Salta a través de su Dirección General de Investigaciones, culminó con la detención de los principales sospechosos y el secuestro de elementos clave para la causa.
La investigación contó con la intervención directa de la Fiscalía Penal de Rosario de la Frontera, que dirigió las actuaciones, y el Juzgado de Garantías N° 1, responsable de emitir las órdenes judiciales necesarias para los procedimientos. Por su parte, los acusados deberán responder por los delitos de asociación ilícita y estafa.
El caso comenzó a gestarse en junio, cuando comenzaron a registrarse las primeras denuncias de damnificados. Fue así como la División Brigada de Investigaciones 13 asumió la responsabilidad de poner en marcha las tareas de inteligencia y el análisis de la información recabada.
Este trabajo permitió identificar a los integrantes de la organización y delinear el alcance de su estructura, que, según las sospechas de los investigadores, funcionaba con roles claramente definidos y una coordinación precisa.
A partir de la información recopilada, reconstruyeron que el método utilizado por la banda consistía en ofrecer a los usuarios de distintos barrios la posibilidad de acceder a descuentos significativos en el pago de boletas de servicios públicos.
Para ello, solicitaban dinero por adelantado y lograban explotar tanto la confianza como la vulnerabilidad económica de las víctimas. Este esquema, sencillo en su concepción, pero efectivo en su ejecución, generó un flujo constante de denuncias que motivó la intervención de la justicia y la policía.
La fase decisiva de la investigación se materializó con la realización de seis allanamientos simultáneos en diversos sectores de Rosario de la Frontera. Según precisaron fuentes de la causa, los operativos se concentraron en los barrios San Antonio, 9 de Julio, Palermo y la zona Centro, donde se ubicaban los domicilios de los principales investigados.
Como resultado, las autoridades lograron detener a los sospechosos y ponerlos a disposición de la Justicia. Además, confirmaron el hallazgo y secuestro de una serie de objetos que resultarían fundamentales para el esclarecimiento del caso.
Entre los elementos incautados figuraron teléfonos celulares, esenciales para la comunicación y coordinación interna de la banda, una computadora utilizada para la gestión de datos y un posnet de pago, que habría servido para simular transacciones o cobrar los montos exigidos a las víctimas.

