Familiares del niño comenzaron a tirar piedras a la casa del presunto asesino, y este respondió disparando una 9mm. Posteriormente, vecinos incendiaron el bunker donde él vendía drogas. En el lugar tuvo que intervenir Infantería.
Durante el fin de semana, se dio una balacera en el barrio Los Pumitas, al noroeste de Rosario de Santa Fe. Al parecer, el objetivo del ataque era dar con el capo narco, Cristian Villazón, apodado como "El Salteño". Desgraciadamente, las balas llegaron a Máximo Jerez, un niño de 12 años, quien perdió la vida; mientras tres de sus primos, fueron heridos.
Po ello, durante el mediodía de este lunes, y luego del funeral del nene, familiares de la víctima se acercaron al supuesto domicilio del Salteño y comenzaron a arrojarle piedras. Momentos después, el hombre de la vivienda se asomó por el techo y respondió con disparos de una 9mm.
A la gresca, se sumaron los vecinos de la cuadra, quienes afirman que siempre son víctimas de amenazas, por lo que empezaron a romper las paredes de la casa e, incluso, incendiaron el búnker donde el acusado solía vender drogas.
La Policía llegó al lugar cuando una piedra golpeaba el rostro del Salteño provocándole un corte en la cabeza, sin embargo, el ataque continuó y las fuerzas de seguridad se vieron superadas porque no pudieron sacar al dealer de su hogar.
Minutos después, el Ministerio de Seguridad de Santa Fe envió a efectivos del Grupo de Infantería de Respuesta Inmediata (G.I.R.I). Estos se apostaron en la casa atacada y se sumaron más patrullas. Mientras tanto, se seguían escuchando disparos, mientras la policía sacaba al presunto narco de la casa, en medio de un importante operativo.
Aunque las personas agrupadas le tiraron piedras y botellazos al "Salteño", los uniformados lograron ponerlo a salvo. Luego, los vecinos se enfrentaron con la policía diciendo "Si ustedes no hacen justicia esto va a ser peor".